Viviendo como un Espartano (o peor aún, como un Lacedemonio)

Al nacer te muestran a los ancianos de tu tribu (que pueden ser compañeros de tu padre en su mesa comunal) para que decidan si eres digno de vivir, o por el contrario ser arrojado a alguna sima del Monte  Taigeto. Desde muy pequeño te enseñan a no tener miedo de la oscuridad o de la soledad; y de vez en cuando, tu madre te baña en vino para “templar” tu cuerpo. A los 5 años empieza tu educación, sales de tu casa y vives junto a tu compañeros de edad en un barracón. Aprendes danza y poesía. Pero la danza es pírrica (acarreando armadura) y los poemas son de Tirteo que de mayor cantarás como himnos de guerra. Aprendes a leer y escribir, pero lo justo para entender los despachos de guerra. Eres miembro de una “manada” y compites contra las otras “manadas” de niños espartanos en juegos y deportes. A los 12 años eres oficialmente un joven (Meirakion) y empieza lo fuerte. Te cortan el pelo, te quitan las sandalias para que tus pies se fortalezcan. Tu única prenda es una capa corta y fina; y a pasar frío que así te preparas para la dureza de la guerra. Aunque en realidad la mayor parte del día estás en pelotas, ya que todos los ejercicios atléticos se hacen en desnudo heroico. A la noche a dormir a tui barracón en tu camita de juncos cogidos por ti mismo en el río Eurotas. En invierno, te dejan complementarla con cardos, que los ancianos dicen que son muy calentitos aunque pinchen.
Comer, lo que se dice comer, comes poco. A menos que robes para mejorar tu dieta. Eso si, que no te pillen. Saber robar comida es muy útil para la guerra. Además los ancianos dicen que cuando uno está Kiss_Briseis_Painter_Louvre_G278[1] delgado crece más alto.
Tienes un adulto guardián, tu erastes (amante). Es muy probable que tu primera relación sexual sea con él. No hay problema, ya te tocará el turno de ser la parte activa de una relación homosexual cuando seas mayor. De momento, eres la parte pasiva. En cualquier caso, e independiente de tus inclinaciones sexuales te casarán para que tengas cuantos mas hijos mejor.
Con 18 años eres un adulto (eiren) y entrenarás a los niños durante un año. Después entrarás a formar parte de una de las mesas comunales junto a otros 14 ciudadanos de edades variadas. Con ellos pasarás la mayor parte de tu tiempo, ya que no vivirás en casa con tu mujer hasta cumplidos los 30 años. Cuando no estas en la guerra, estás entrenando para ella, cazando, haciendo deporte o en los coros y danzas. ni que decir tiene que a veces la guerra es bienvenida como un descanso del latazo de entrenar. Tu mili dura 40 años, aunque si te apetece puedes enrolarte en las expediciones guerreras como hizo Hipodamo que murió en la batalla con 80 años. Además del ejercito puedes servir durante un par de años en la Cripteia antes de cumplir los 30 y así te puedes ir entrenando en el asesinato (con nocturnidad y alevosía) con un par de ilotas fornidos.

Categorias: Compartir

Deja un comentario